¡Hola! Tanto si has llegado aquí por casualidad como si sabes perfectamente a lo que vienes, estás invitado a leer el blog y comentar.
En este blog os encontrareis con algunos proyectos y relatos de un intento de escritora (una servidora), mi evolución como escritora, que espero sea positiva, y algunas cosas aleatorias de las que vea la necesidad de compartir.
Espero que os guste, y recordad que las opiniones sinceras se agradecen.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Relato-2 [The Tale]

Ya lo he subido a mi DA [LINK], y ahora lo subo aquí =3. Hace demasiado que no actualizo el Blog, pero por favor (si alguien me leía xD) no me matéis 030.
Se me ocurrió anoche, creo que por fin le he pillado el truco a la narración y me gusta como ha quedado (casi no parece mío owo). Mis fichas son basura traalala 8D (y por favor, si alguien conoce alguna mejor sinopsis que me la diga, lo adoraré eternamente. Ahora en serio, esta sinopsis es basura, necesito algo mejor xDU)
En fin...


Nombre: The Tale
Género: ficción
Edad: TP
Sinopsis: ¿Qué ocurriría si comprendieras que aquellos inocentes relatos que escribes, pudieran no ser tan ficticios como crees?

The Tale


Los nubarrones grises avanzaban lentos. Pronto cubrirían la ciudad, comiéndose las horas extras de luz que otorgaba el verano.

Una chica mantiene conversaciones insustanciales en su ordenador, buscando un punto de inspiración que la ayude a continuar el relato que ha empezado en el word. Odiaba eso, las historias que no eres capaz de terminar, aquellas que nacen en un flash en tu mente pero que a la hora de terminarlas no encuentras un final a la altura de lo que el subconsciente te proporcionó antes.


Mientras cavilaba los nubarrones empezaron a descargar. Brillantes rayos partían el cielo, seguidos de el bramido característico que rompía el murmullo de las gotas en el cristal y las cañerías.

A ella le encantaban las tormentas, podría decirse que la aislaban y relajaban. Pero hoy no se había dado cuenta siquiera de la repentina oscuridad que no debería de haber llegado hasta dos horas después, la historia la había absorbido.


“Qué había detrás de la puerta”. Ese pensamiento le martilleaba. Había dejado a la joven protagonista de su relato sola en un gran caserío, persiguiendo unos ruidos que parecían esconderse detrás de aquella puerta. Pero no se le ocurría nada a partir de ese punto. Nada.

Como un flash de repente la chica tuvo una idea, nada, eso era lo que le esperaba detrás de la puerta. Pero no una nada asfixiante que precediera a algo maligno, como acostumbraba a leer en los relatos, sino una nada que inspirase tranquilidad, un ambiente contrario a el resto de la casa. La trampa perfecta. En la siguiente escena su protagonista confiada por el ambiente entraría en la sala, donde comprendería que había muerto. Comprendería que lo que había hecho había sido perseguir a su propio fantasma.

La chica pone el punto final a su historia, la guarda y cierra el programa. Mañana se encargaría de subirla al blog.


Se despide de sus amigas y se dispone a cenar la fría tortilla que su madre le había hecho y guardado, para que cenara sin ellos. Después de lavar los platos, vuelve a su ordenador para apagarlo. Leería hasta que el sueño la venciese.

Cuando apagó el ordenador la estancia se sumió en la oscuridad. Se dirigió derecha a encender la luz, pero antes de que llegara un rayo ilumino la habitación por completo, dejándola completamente blanca por un par de segundos. El trueno sonó cuando aún no había vuelto la penumbra. La tormenta, que hasta hace nada le había pasado desapercibida, ahora estaba justo encima de su casa.


La chica se había estremecido cuando sonó el trueno, pero su estremecimiento no era a causa de la tormenta. Sino de la historia que le había venido a su mente como un flash. Como todas las historias que le venían así, no tenía final. Pero normalmente no se habría estremecido sino fuera porque en este caso la protagonista no era anónima. No se había visto, pero por algún motivo había reconocido la historia como la suya propia. Las acciones de la protagonista eran las mismas que ella había realizado hasta el momento y las que ella acababa de pensar en hacer.

El hecho le habría parecido una simple anécdota curiosa si no fuera por el final que tenían siempre esas historias una vez adivinaba su desarrollo final. Sus protagonistas nunca vivían, y ese era el pensamiento que le había hecho estremecerse.


Decide olvidarse de todo y acostarse, no merece la pena ni abrir el libro, sabe perfectamente que no conseguirá avanzar una linea. En la cama intenta concentrarse en los ruidos de la tormenta, que siempre la calman, pero no puede dejar de darle vueltas al flash. Las horas van pasando, de ser las diez han pasado a ser las dos de la madrugada. Finalmente se da por rendida y decide encender otra vez su ordenador, para así plasmar en un documento el nuevo relato y poder sacárselo de la cabeza.


La chica empieza a escribir, hacia las cuatro llega al final del flash. Ahora llega lo difícil, escribir un buen final sin muerte. Detrás de la ventana la tormenta sigue igual.

La chica piensa en varias posibilidades. El clásico final de todo era un sueño no sirve para esta historia. Una milagrosa salvación sería algo muy trillado y el resto de opciones sólo son cosas malas. La chica piensa y piensa, pero no se le ocurre nada que le de la opción de vivir. De repente una idea se le pasa fugaz por la cabeza, “y si... ¿tuviera la opción de elegir, aunque sea bajo alguna condición?”. La idea le pareció vaga, pero era la que más le convencía. Sus dedos parecieron deslizarse sobre el teclado, describiendo como una voz surgía entre los truenos y le dejaba elegir entre morir ahora e ir a un lugar de paz o seguir viviendo bajo la condición de que cuando muriese sería parca en el infierno por toda la eternidad. En el relato ella dudó un instante y luego eligió. Eligió vivir.


La chica relee el texto, no le gusta la idea de ser parca pero era así como le había venido el final. Guarda, e inmediatamente cae rendida de sueño sobre el escritorio. Mientras que en la pantalla aparecen unas letras: “Contrato validado” sobre un fondo negro en la tormenta, que ya está despejando, brilla un último rayo, sin trueno que le de voz.



|---FIN---|

Eso es todo, espero que hayan disfrutado la historia ^^

mata-ne~